Conocemos la labor de apoyo que realiza esta entidad con las personas refugiadas que llegan a España
La historia de la ONG Rescate es una travesía marcada por la resiliencia y la esperanza. Desde 1960, esta organización ha acompañado a personas refugiadas, desplazadas y migrantes a reconstruir sus vidas lejos del hogar que se vieron obligadas a abandonar, víctimas de conflictos, persecuciones, violencia o desastres naturales.
Sus programas abarcan desde el asesoramiento jurídico hasta el apoyo psicológico, formación laboral, enseñanza del español y asistencia en centros o pisos de acogida.
Hoy, Susana Basagoiti, responsable de compras, logística, mantenimiento y donaciones de la ONG Rescate, nos abre una ventana al impacto de su labor. Nos cuenta cómo la colaboración, tanto de particulares como de empresas, hace posible que miles de personas encuentren el apoyo necesario para empezar una nueva vida en España. En sus palabras, descubrimos cómo cada artículo donado, por pequeño que parezca, no solo cubre necesidades básicas, sino que se convierte en un símbolo de esperanza y dignidad para quienes comienzan de nuevo.
¿Cómo y cuándo surgió esta entidad?
La ONG Rescate inició su actividad en 1960, en Madrid, como la delegación de la entidad norteamericana del Comité Internacional de Rescate (IRC, en sus siglas en inglés) en España. Desde entonces, atendemos a personas refugiadas, víctimas de conflictos, violencia y desastres naturales en sus países de origen y destino, prestando especial atención a los colectivos más vulnerables, mujeres, menores y personas del colectivo LGTBIQ+.
En 1992, IRC-España se reconstituye como ONG española, legalmente autónoma, dando lugar a la organización actual, ONG RESCATE. La entidad continúa con el trabajo de asesoría jurídica con el que se inició, así como con programas que facilitan la integración de personas solicitantes de asilo y refugiadas.
En 2017, ONG Rescate implanta diversos programas de atención a personas migrantes y refugiadas por motivos de género y ya en 2023, incorporamos 320 plazas de acogida para personas refugiadas en España.
Nuestra misión es apoyar a estos colectivos en la reconstrucción de sus vidas y ayudarles a encontrar una solución a largo plazo para solventar su situación actual.
¿Cómo es la situación de las personas refugiadas que llegan a España?
Su situación es de extrema vulnerabilidad. Muchas de estas personas llegan tras largos y peligrosos trayectos, dejando atrás no solo sus hogares, sino también sus redes de apoyo, sus trabajos y en muchos casos, sus familias.
Una vez en España, se enfrentan a procesos burocráticos complejos y extensos para solicitar protección internacional, lo que en ocasiones puede alargar su acceso a los derechos básicos. Durante este tiempo, deben adaptarse a un entorno desconocido, con barreras como el idioma, el acceso a una vivienda, la falta de redes sociales y las dificultades para integrarse laboral y socialmente en una sociedad distinta.
Además, las condiciones de vida de estas personas suelen ser precarias, especialmente durante los primeros meses. Es ahí donde nuestra entidad actúa para brindar a estas personas apoyo integral: alojamiento temporal, atención psicológica, asesoramiento legal y formación para fomentar su autonomía.
¿A cuántas personas han atendido desde los inicios y cuál es el perfil más habitual de las personas que atienden?
El perfil más habitual incluye a familias y personas que han huido de conflictos armados, persecuciones políticas o violaciones de derechos humanos en países de origen como Siria, Venezuela, Colombia, Malí y Afganistán, por citar algunos.
Son personas de cualquier género y edad que enfrentan riesgos específicos, como violencia de género, trata de personas o persecución por motivos de orientación sexual o identidad de género.
No disponemos de datos totales de nuestra actividad en España desde los inicios, pero sí del impacto durante el pasado ejercicio, en el que atendimos a más de 12.000 personas, formamos a más de 3.500 personas formadas y proporcionamos más de 350.000 ayudas directas a personas refugiadas y desplazadas.
¿Qué tipo de apoyo brindan a los colectivos a los que ayudan?
A través de nuestros programas de acogida, inclusión y atención humanitaria brindamos servicios de asesoría jurídica, apoyo psicológico, formación laboral e integración social. ONG Rescate busca cubrir las necesidades urgentes de este colectivo.
La organización también ofrece servicios de alojamiento temporal y clases de español para ayudar a superar la barrera del idioma y facilitar la adaptación al entorno laboral y social. Nuestra labor es fundamental para acompañar a estas personas en el proceso de reconstrucción de sus vidas en España.
¿Qué papel juegan las donaciones de productos de primera necesidad, como las que reciben del Banco de Productos Acompartir, en las actividades diarias de Rescate?
Las donaciones de productos de primera necesidad que recibe ONG Rescate, como las del Banco de Productos Acompartir, son esenciales para cubrir las necesidades básicas de las personas solicitantes de asilo y refugiadas en las diferentes fases de acogida.
En la fase 1 de acogida, en la que las personas usuarias viven en centros de acogida, son especialmente útiles los productos de higiene personal y artículos de limpieza, así como ropa de abrigo y calzado. Estos productos ayudan a asegurar la salud y el bienestar en un entorno comunitario, donde compartir espacios requiere mayor atención a la higiene.
En la fase 2 de acogida, cuando las personas pasan a vivir en pisos de acogida y empiezan a ganar autonomía, las donaciones se orientan más hacia productos que promuevan la autosuficiencia. En esta etapa, los enseres domésticos (como utensilios de cocina y ropa de cama), productos de limpieza para el hogar y artículos de cuidado personal son claves, ya que les permiten gestionar su propio espacio y facilitar una vida cotidiana independiente. También son fundamentales los alimentos no perecederos y los productos de alimentación infantil para cubrir necesidades alimenticias básicas.
¿Existen productos específicos que consideren más urgentes o que tengan mayor demanda entre el colectivo al que asisten?
Así es. Dada la situación de vulnerabilidad y las necesidades inmediatas en las fases iniciales de acogida de estos colectivos, los productos más demandados suelen ser:
- Productos de higiene personal: jabones, champús, pasta de dientes, cepillos, toallas sanitarias y pañales. Estos son fundamentales, tanto en fase 1 como en fase 2, especialmente en la fase inicial de acogida, para garantizar dignidad y bienestar básico en los centros.
- Ropa y calzado de calidad: especialmente en invierno, hay una demanda urgente de ropa de abrigo y calzado resistente para todas las edades, ya que muchas personas llegan sin vestimenta adecuada para el clima local.
- Enseres domésticos básicos: utensilios de cocina, ropa de cama y artículos de limpieza. Estos productos son especialmente útiles en la fase 2, cuando las personas se trasladan a pisos de acogida y requieren elementos básicos para administrar sus hogares con cierta autonomía.
- Alimentos no perecederos: alimentos básicos como arroz, pasta, legumbres, conservas, leche en polvo y alimentos infantiles. Estos productos son esenciales, sobre todo en fase 2, cuando las personas están en pisos de acogida, ya que aseguran una alimentación adecuada y suplen necesidades nutricionales en condiciones de estabilidad limitada.
La actividad de Acompartir no existiría sin la solidaridad de centenares de empresas que donan sus productos, sin embargo, éstas aún representan un mínimo porcentaje de todas las que podrían ayudar. ¿Qué mensaje le daría a esas empresas -fabricantes y distribuidores- para que se animaran a donar sus productos a través de Acompartir?
A las empresas que aún no se han sumado, les trasladaríamos que donar productos a través de Acompartir es una oportunidad única para transformar vidas de personas que atraviesan situaciones de gran vulnerabilidad, como son las personas solicitantes de asilo y refugiadas.
Cada producto donado, por pequeño que parezca, tiene un impacto directo en quienes buscan empezar de nuevo, desde lo más básico, como alimento, abrigo o higiene. Además de contribuir al bienestar social, estas donaciones ayudan a construir una sociedad más justa y solidaria, demostrando el compromiso de la empresa con los valores de responsabilidad social y sostenibilidad.
Acompartir facilita el proceso para que, con cada donación, la empresa sepa que está contribuyendo directamente al cambio positivo en la vida de miles de personas, lo que también fortalece su imagen y vínculo con la comunidad. La solidaridad empresarial no solo enriquece a quienes reciben, sino que crea un impacto que también repercute positivamente en la identidad y propósito de la empresa misma.
¿Cómo pueden los particulares y/o empresas colaborar con la ONG Rescate?
1. A través de donaciones económicas
– Particulares: pueden realizar aportaciones puntuales o convertirse en socios/as de Rescate mediante donaciones regulares, lo cual permite a la organización contar con recursos constantes para financiar programas de asistencia, vivienda, apoyo legal y capacitación laboral.
– Empresas: pueden colaborar con donaciones monetarias o mediante patrocinios de proyectos específicos. Las empresas también pueden beneficiarse de deducciones fiscales, ya que Rescate está registrada como una organización sin ánimo de lucro.
2. Donaciones de productos de primera necesidad
– Productos básicos: las empresas fabricantes o distribuidoras pueden donar productos como alimentos, ropa, artículos de higiene personal y enseres domésticos.
– Colaboración con Acompartir: las empresas pueden canalizar estas donaciones a través de la plataforma Acompartir, lo cual facilita la logística, tanto de entrega como de recogida.
3. Voluntariado
Particulares: Rescate cuenta con un equipo de voluntarios que participa en actividades de apoyo directo a las personas refugiada. Es una forma directa de conocer y ayudar a estas personas.
Voluntariado corporativo: las empresas pueden ofrecer a sus empleados la oportunidad de realizar voluntariado en programas de Rescate, ya sea mediante asesoría profesional (legal, psicológica o educativa) o en actividades de sensibilización y apoyo social.
4. Sensibilización y difusión
Tanto particulares como empresas pueden ayudar a visibilizar la misión y necesidades de ONG Rescate. Las empresas pueden incluir información sobre su colaboración en sus redes sociales, páginas web o incluso en comunicaciones internas y externas, sensibilizando a sus propios empleados, clientes y socios sobre la importancia de apoyar a las personas refugiadas.