La gestión de los productos invendidos representa un problema financiero de primer orden para muchas empresas, por no hablar del coste de almacenamiento, la depreciación del valor de la mercancía, producida, entre otros, por la obsolescencia de los productos -especialmente si son tecnológicos- o el deterioro de la percepción de la imagen de la marca por no lograr vender.
Ante esta situación, parece casi obligado que las empresas reintroduzcan sus productos invendidos en el mercado. A continuación, te damos cinco ideas para dar salida a ese stock que está cogiendo polvo en el almacén y que, con el paso de los días, pierde valor.
1. Outlets y liquidaciones
Numerosos sectores han optado por esta fórmula para deshacerse de sus restos de colección, muestrarios o productos descatalogados. A pesar de que la fórmula de los outles puede ser eficaz para dar salida al género invendido, no todas las categorías de productos se prestan a tener salida por esta vía, además de que el comprador encontrará una variedad menor de productos y políticas de devoluciones más rígidas. Normalmente se ubican a las afueras de las grandes ciudades, aunque en los últimos años han dado el salto al mercado online.
2. Repackaging
Considerar la posibilidad de transformar los productos o empaquetarlos de una manera que los haga más atractivos para los consumidores puede ser una estrategia para dar salida a aquellos productos que no hayan perdido valor y que sigan siendo interesantes para el mercado. Cambiar el diseño del embalaje, agregar funciones adicionales o reorientar el producto hacia un nuevo mercado objetivo son algunas estrategias que se pueden poner en marcha para generar un nuevo interés.
3. Rebajas, ofertas o descuentos atractivos para fidelizar o atraer al cliente.
En el vasto universo comercial, las ofertas y descuentos están a la orden del día. Los clientes siempre están en busca de buenas ofertas y proporcionar descuentos significativos puede incentivar la compra. Programas de fidelización, paquetes promocionales o descuentos por tiempo limitados que generan sensación de urgencia en el consumidor, son algunos ejemplos de estrategias que pueden generar un aumento en las ventas.
4. Vender en otros mercados
Según qué sectores no resulta extraño que las marcas envíen a otros países la mercancía desfasada o que, por cuestiones climatológicas, por ejemplo, no han conseguido vender en el país de origen. El destino suele ser países de Europa del Este o América del Sur. Aunque esta vía pueda ser una buena alternativa, la desventaja son los costes de transporte, logística o aranceles asociados a la operación.
5. Donación a colectivos necesitados
Cuando ya parece que todo está perdido, donar los excedentes a colectivos necesitados es una excelente alternativa para que las empresas puedan dar salida a sus invendidos a coste cero mientras ayudan a mitigar la pobreza en España, mejoran su reputación y cumplen con su política de responsabilidad social corporativa.
No es preciso viajar al Tercer Mundo para detectar los signos de exclusión social. En España, se vislumbra un Cuarto Mundo en el que hay una red asistencial para proporcionar alimento, pero no para atender el resto de necesidades básicas que tienen las personas a lo largo de todo un día. Desde los artículos más básicos para la higiene personal, a los productos para la limpieza de casa o los electrodomésticos más esenciales.
Muchas empresas prefieren donar sus excedentes invendidos a colectivos vulnerables. Hacerlo mejora su imagen y su reputación en la sociedad, pero, además, comporta importantes incentivos fiscales. El banco de productos Acompartir se encarga de todo el proceso, desde la recogida del stock al almacenaje y distribución del excedente a los colectivos necesitados de toda España, sin que las empresas donantes tengan que destinar ni un minuto de su tiempo a esta gestión. Además, la entidad entrega a las compañías un informe anual con la trazabilidad de sus donaciones.